El picking es uno de los términos más importantes de la actualidad en el mundo logístico en particular y en el mundo empresarial en general. Sin embargo, ¿qué es el picking? Esta es una de las preguntas que más cuesta contestar a algunos profesionales o a aquellos que quieren incluir algunas de sus ventajas en su negocio. Por ello, a continuación se ofrecerá una definición de picking así como una enumeración de todas y cada una de sus ventajas.
Para definir qué es el picking, se puede empezar por su origen en inglés: pick and pack, un mundo que hace referencia a la preparación de pedidos mediante el empleo mínimo de pasos, así como con el fin de volver más ágil todo el proceso. Así pues, el picking es un proceso para la preparación de pedidos en un almacén por el que se hace la recogida y la combinación de cargas no unitarias para conformar pedidos específicos para el cliente. Este método o estrategia para simplificar los procesos y minimizar el número de sus pasos puede sintetizarse en los siguientes puntos:
Ahora bien, independientemente de las tareas que realiza, aquello por lo que el picking es tan célebre es precisamente porque busca mejorar la localización de cada uno de los productos dentro de un almacén, así como su identificación de la forma más rápida posible. Esto permite a los operarios encargados de la preparación de pedidos disponer más rápidamente de todo lo que necesitan para completar una orden. A pesar de todas las ventajas que tiene el método de picking se trata de un método que requiere de una gran coordinación, así como la necesidad de que no aparezcan ciertas limitaciones.
Una vez que se ha definido qué es el picking puede hablarse de los diferentes tipos de picking que existen. Todos ellos tienen en común el objetivo de la preparación de pedidos específicos para los clientes reduciendo todo lo posible los pasos para ello y optimizando al máximo su proceso.
Picking por radiofrecuencia
El picking por radiofrecuencia consiste en que los operarios disponen de dispositivos que funcionan como “agendas” que les van asistiendo en todo el proceso de preparación de pedidos. El personal dispone de la información necesaria para localizar los productos y el orden en el que se deberían recoger para evitar todos los tiempos muertos y reducir todo lo posible el proceso.
Picking on light
Este proceso de picking es el más básico. Se trata de un proceso en el que los estantes disponen de iluminación led que indica al personal dónde pueden encontrar el producto que deben coger para la elaboración del pedido final. Este método es el ideal para los llamados “almacenes caóticos”
Voice picking
Es un sistema de gestión de almacén en el que un encargado del pedido tiene asistencia de la ubicación de los productos mediante comandos que dirigen sus operaciones por voz. Es un sistema muy fiable y eficiente y que resulta adecuado para almacenes complejos. Tiene la ventaja de que deja libres las manos del personal.
Visual picking
Es un sistema basado en el anterior, y supone de hecho una mejora respecto a él. Se cuenta con información que se recolecta por voz, y además se muestra una interfaz con la ubicación de cada producto así como una serie de instrucciones para la preparación del pedido. Es un sistema conectado al SGA y permite una coordinación completa con todas las operaciones de almacén.
Implementar el picking en un almacén puede traer una serie de ventajas y una eficiencia para toda su organización cualitativamente superior a la de un almacén tradicional. Una de las principales características que tiene el picking es que aumenta notablemente la intensidad del trabajo para la mano de obra al mismo tiempo que hace todo el trabajo más sencillo para los operarios. Ahora bien, es necesario aunar la automatización de procesos con el picking para poder obtener el máximo rendimiento. Junto con ello, deben tenerse en cuenta algunos factores necesarios para conseguir el éxito en las tareas de picking.
Entre la tecnología necesaria para poder sacarle el máximo partido al método de picking puede destacarse la involucrada en el seguimiento de inventario (softwares que ayudan a controlar la posición de cada elemento del inventario), el software encargado de la preparación de las listas de envío (necesarias para poder confeccionar el contenido de cada pedido final) y las facturas requeridas para cada uno de los pedidos que ya han sido completados. Con el fin de agilizar los procesos, algunos sistemas automatizados también pueden encargarse de la interacción directa con los operarios de un almacén. De esa manera, se obtiene una máxima eficiencia desde el momento de recepción del pedido hasta su elaboración de fase final.
Independiente de los propósitos que tiene en sí el método de picking, puede decirse que aporta determinadas ventajas que no pueden pasarse por alto, sea cual sea la forma en la que se implementa.